-Pero Clau...¿En dónde---
-Sh...Ahora sí. Puedes abrir los ojos.
Laura se quita las manos de los ojos, y observa todo a su alrededor.
-¿De quién es el apartamento?
-Tengo mis contactos. -Le contesta Claudia, moviendo de arriba a abajo las cejas.
-Payasa...
-Mira. Sigue el rastro.
Laura baja la mirada, y ve desde la puerta un rastro de besitos de chocolate.
-¿Qué acaso se les habían acabado los pétalos de rosas? -Pregunta con cara de maldad.
-Ay...mujer...que hasta que me quitas la gracia.
-Lo siento. -Se disculpa con una sonrisa tierna- Gracias. Recordaste que son mis favoritos.
-Sí...-Le contesta con la misma sonrisa. - Síguelos.
Continúan caminando, Claudia al lado de Laura, un poco más atrás, queriendo analizar todas sus reacciones. Caminan, hasta llegar al pequeño comedor dentro de la cocina. La mesa estaba llena de más besitos de chocolate, con los platos, vasos y cubiertos acomodados listos para servir. Las luces tenues y amarillas de las velas. Una música suave, casi imperceptible en el fondo. El ambiente perfecto.
Laura se voltea, y pone sus brazos en los hombros de Claudia.
-Gracias por todo esto. - La besa tiernamente.
Claudia toma sus caderas con ambas manos, y empiezan a balancearse de un lado a otro, mientras se besan, al ritmo lento de la música.
-Eres increíble. Te mereces esto y más...
Luego de un rato así...
-¿Comemos? -Le pregunta Claudia.
-Está bien, pero después de eso probamos lo que cocinaste, que tengo hambre.
-Ash...Eres imposible. -Le dice moviendo la cabeza en negación, con una sonrisa que trata de disimular.
-¿Qué no era increíble?
-Sí, también.
-Te quiero.
-Yo también te quiero...
no es por nada... pero... y el suspenso cruel.. donde quedo?
ResponderEliminarcuñizzzz.... waaa.. esta genial...
ResponderEliminarpero... continuaraa????
jajaja sí! continuará! ud. siga pendiente xD
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